Un vaso, una serie y una marca: publicidad subliminal en GOT y sus efectos
Ahora que la serie de Game of Thrones ha culminado y la
nostalgia nos embarga, no queda más que hacer análisis de lo que nos ha dejado
esta impresionante serie.
El cuarto capítulo de la última temporada nos ha dado un
tema del cuál hablar; justo cuando se está celebrando la victoria de la Batalla
de Winterfell, en donde los vivientes vencieron a los muertos, aparece
“equivocadamente”, un vaso de la reconocida marca Starbucks.
En el plano aparece Daenerys (Emilia Clarke), sentada en la
mesa y en frente el vaso “intruso”.
Ahora bien, me pregunto, ¿fue realmente un error o fue algo
planeado? A mi parecer fue un acto finamente planificado entre los productores
y la marca. Nada improvisado, todo calculado meticulosamente.
Una manera de crear ruido entre la marca (Starbucks) y la
producción (GOT); si no se hubiera tratado de algo planificado, ¿entonces por
qué tuvo que tratarse justamente de un vaso de la reconocida marca?
Sorprende aún más la respuesta de la marca a través de
Twitter, en donde señalan: “nos sorprende
que no haya pedido un Dragon Drink”, sorprendentemente una bebida que ellos han
llamado así. “Nuestra bebida de dragón es nuestro refresco de mango Dragonfruit
Starbucks hecho con Coconutmilk”, contestaron en la misma publicación a un
cliente.
La publicidad subliminal,
son los emplazamientos que se realizan en producciones audiovisuales. Por
ejemplo, escenas que se realizan en un supermercado, suelen aparecer
reconocidas marcas; sería algo totalmente natural, ¿no lo creen?
Ahora bien, sucede que en
esta escena de GOT, la ambientación medieval de la serie, no se relacionaba en
nada a la utilización de un vaso Starbucks, por eso sorprendió tanto a sus
seguidores.
Había una ruptura total
entre el producto y la producción audiovisual y sin embargo, el “bloopper”
generó la respuesta (in)deseada; de hecho la CEO de la compañía de los
deliciosos café, señaló en una entrevista, que la marca recibió 10.627
menciones a partir del “error” del vaso. Otras fuentes señalan que fueron al
menos 193.000 una cifra bastante distinta.
Todo esto se traduce en
ventas, difíciles de calcular, sin embargo, si es lo que se esperaba, el efecto
fue el esperado y lograron, a partir del principio de la publicidad subliminal,
alcanzar un método de publicidad con mucho más alcance y efecto.
En un momento, se creyó
que quien había colocado el vaso en el set, fue la actriz Sophie Turner, quien
interpretó a Sansa Stark, sin embargo hace poco ha salido al paso, señalando
que su personaje le impide ingerir bebidas durante la grabación, ya que se ve
en la necesidad de utilizar un ajustado corsé que tendría que retirarse, si
tuviera necesidad de ir al baño, por lo cual decidió no consumir nada, mientras
interpretaba el papel.
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